Jacobo y Diana nos recibieron amorosos en su casa de Caracas. Un remanso de paz en todos sentidos.
Por la noche, en medio de la ciudad caótica, lo único que se escucha es el sonido de los grillos y las ranas. Eso, y las largas conversaciones, que nos llevamos como tesoros.
Bajando de regreso a Caracas desde la punta del Cerro de Ávila.
En Caracas se ve Arte Urbano por todas partes. Pero es curioso, prácticamente todo es propaganda del Estado.
Se le llama entonces Arte? Cuándo se considera Arte a la propaganda? Cuánto tiempo tiene que pasar para que la propaganda se convierta en Arte? Lo dicta la estética, el contexto o la temporalidad? En cualquier caso, no lo dicta el Comandante.