La fachada de la extensión del Museo de Anchorage parece hecha con bloques de hielo, todo reflejos.
Y adentro todo es madera, para que el frío se sienta sólo afuera…
Entre 1890 y 1910 más de 250,000 personas viajaron en estampida hacia Alaska y Yukon, en el Norte de Canadá en busca de oro. Muchos lo encontraron y muchos más se quedaron con las ganas de encontrarlo. La Gold Rush de esos años marcó la historia reciente de esas regiones y es una parte importante de la identidad que hoy las conforma.
La Mina Independencia fue una de las más productivas de la región de Anchorage y funcionó entre 1883 y 1951, cuando tuvo que cerrar debido a la caída del valor del oro que trajo consigo la Segunda Guerra Mundial. A partir de 1970, el lugar es considerado un sitio histórico y parque nacional.
Que no se diga que fuimos a Alaska y no vimos iglús, porque los vimos. Y varias boyas también.